La ermita de San Román de Moroso es un templo católico de estilo prerrománico situado en Bostronizo (Cantabria, España), escondido en uno de los montes del municipio Arenas de Iguña.
Este pequeño edificio adscrito al denominado arte de repoblación, tradicionalmente se la ha considerado como de estilo mozárabe pero la historiografía moderna es partidaria de abandonar esta denominación en pos de la primera.
Se cree que fue construido probablemente en el siglo X y formaba parte del monasterio de Moroso, de gran importancia en la Alta Edad Media.
El tipo de construcción es noble y de cierta calidad formado por sillares perfectamente escuadrados en las esquinas e hiladas de sillarejos en el resto de la fábrica.
Los muros tienen un grosor entre los 60 y 70 cm.
Consta de una nave con una portada de entrada principal hacia el norte, algo poco habitual, en arco de herradura, al que le falta las columnas y capiteles, y un ábside rectangular precedido de un Arco triunfal en herradura con cimacios escalonados, al que también faltan las columnas.
El ábside posee un pequeño vano monolítico en el centro en forma de ojo de herradura y enmarcada por una cruz patada. Dentro de su decoración cabe destacar los grandes modillones florales que coronan los muros, de cuatro y seis pétalos y esvásticas.
La espadaña de doble tronera en arco de medio punto es de construcción posterior, probablemente del siglo XVIII.
En torno al eremitorio se descubrió durante las labores de restauración una necrópolis altomedieval con tumbas de lajas y enterramientos en sarcófagos.